El sector inmobiliario vive un momento crucial en su evolución. Construir un proyecto inmobiliario pasa por dar respuesta a múltiples necesidades: del inversionista, del usuario final y hasta del cuidado del planeta.
Para quienes tienen por delante el desafío de seguir proponiendo y comercializando proyectos inmobiliarios, una fase crítica es cuando llegamos al momento de pasar de los planos al inicio de obra.
El avance de la tecnología nos propone una transformación sin precedentes. Pero aunque existe la tecnología, lo cierto es que la industria de la construcción no ha dado todavía un salto cualitativo en su digitalización. En comparación a otras industrias, las empresas invierten en promedio menos del 1% de ingresos en aspectos de innovación y tecnologías.
¿Por qué ocurre esto? Si ya hemos planeado y diseñado un proyecto con un fuerte componente tecnológico, ¿por qué cuando llegamos a la ejecución de la obra… parece que retrocedemos miles de años?
Esto seguro les parece una exageración de mi parte, pero les aseguro que no es así. El desarrollo inmobiliario tiene retos que aún no supera porque aún hace falta mucha visión estratégica desde el liderazgo para asumir los cambios necesarios.
Retos al construir un proyecto inmobiliario
A pesar de su importancia para el crecimiento económico y el bienestar social, el sector de la construcción todavía no logra superar desafíos históricos. McKinsey & Company reporta que la productividad de la industria de la construcción se ha mantenido estable en los últimos años, a pesar de todo el aporte tecnológico existente en el sector. Lo que se conoce ahora como el Contech.
Para mí, las tres palabras que hoy definen el éxito en el desarrollo inmobiliario son: eficiencia, rentabilidad y sostenibilidad. Por lo tanto, resulta incomprensible que ya transitando la segunda década del siglo XXI todavía hablemos de desorganización en la obra, falta de comunicación, ineficiencia en la gestión de proyectos, dificultades en la contratación del personal o de los proveedores, desperdicios de materiales, que dificultan la entrega de proyectos y que deja a muchos clientes insatisfechos con una perdida considerable de capital en el proceso.
¿Es posible atender y solventar estos problemas de comunicación fragmentada, planificación rígida, opacidad de la cadena de suministros, encuentro con los mejores talentos y proveedores, y control de recursos, materiales y energía? Estoy seguro de que la respuesta es una afirmación contundente. No queda espacio para la duda.
Contech viene pisando fuerte en el mundo y, por supuesto, también en Latinoamérica. Brasil es una gran potencia, pero no muy lejos están México, Colombia o Chile. Los inversionistas están interesados en las startups que pueden mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de los procesos constructivos, ahora le toca al desarrollador inmobiliario comprender que no puede avanzar sin la adopción total de esta tecnología. Construir sin tecnología, insisto, es como si estuviéramos en la Edad de Piedra.
Tecnologías disruptivas para construir hoy
Sobra decir que la adopción de tecnología representa un cambio estructural para la industria de la construcción. Pero, sin duda, hay que volver a repetirlo, porque estamos en una industria que es resistente a los cambios.
Entre las tecnologías que podemos implementar para mejorar la construcción de edificios, trabajos de urbanismo, y superar los desafíos tradicionales, tenemos:
1. Software de gestión de proyectos BIM y de Gestión Basada en la nube “cloud-base construction management”:
- BIM (Building Information Modeling): De nuevo hay que mencionar a BIM. Este permite crear modelos digitales 3D detallados de los edificios, integrando toda la información del proyecto en una única plataforma. Esto facilita la colaboración entre los diferentes actores, mejora la comunicación y optimiza la planificación, el diseño y la construcción.
- Software de gestión de construcción basados en la nube (Cloud based construction-management software): Sistemas de gestión de los procesos de construcción empresarial basados en la nube. Estos centralizan y automatizan procesos como el control presupuestal, el flujo financiero, el abastecimiento, la logística y la gestión de personal. Esto mejora la colaboración, eficiencia, la transparencia y el control de los recursos.
2. Plataformas de contratación de personal y marketplace de proveedores:
- Plataformas de contratación de personal: Conectan a los desarrolladores y constructores con mano de obra especializada de forma rápida y eficiente, agilizando el proceso de contratación y reduciendo costos.
- Marketplace de proveedores: Permiten comparar precios, encontrar los mejores proveedores y agilizar la adquisición de materiales, equipos y servicios empleando data de tiempo real de la obra.. Esto aumenta la transparencia, reduce costos y optimiza la cadena de suministro.
3. Robótica, IoT y drones:
- Robótica: La automatización de tareas repetitivas y peligrosas con robots, como la colocación de ladrillos o la soldadura, mejora la seguridad, la productividad y la calidad de la construcción.
- IoT (Internet de las Cosas): Sensores y dispositivos conectados recopilan datos en tiempo real sobre el estado de la obra, el entorno y el rendimiento de los equipos. Esto permite un monitoreo continuo, la identificación de problemas potenciales y la toma de decisiones oportunas.
- Drones: La inspección aérea con drones facilita la evaluación del terreno, el seguimiento del avance de la obra y la detección de defectos o anomalías.
4. Impresión 3D:
- Impresión 3D de elementos constructivos: Permite crear elementos prefabricados de componentes fuera del sitio, como paredes, vigas y hasta mobiliario con mayor precisión, rapidez y menos desperdicio de materiales. Esto reduce costos, plazos de entrega y el impacto ambiental.
- Impresión 3D de prototipos: Facilita la visualización y el test de ideas de diseño, reduciendo el tiempo y los costos asociados al desarrollo de prototipos tradicionales. Esto puede reducir significativamente el tiempo en la construcción y minimiza el desperdicio de material gracias a su precisión, reduciendo así el impacto del medio ambiente.
5. Construcción prefabricada:
- Sistemas de construcción prefabricados: Los elementos constructivos se fabrican en un entorno controlado y se ensamblan en el sitio de la obra. Esto reduce los tiempos de construcción, mejora la calidad y la precisión, y minimiza el impacto ambiental. También permite la creación de formas y diseños complejos que no se logran fácilmente con los métodos tradicionales.
- Edificios modulares: Edificios construidos a partir de módulos prefabricados que se ensamblan en el sitio. Esto ofrece mayor flexibilidad en el diseño, permite una construcción más rápida y reduce el desperdicio de materiales. De igual manera se pueden utilizar materiales reciclados como plástico, hormigón y otros recursos, promoviendo la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental en los proyectos de construcción. Si bien la inversión inicial en tecnologías de impresión 3D puede ser significativa, su eficiencia y ventajas conducen a ahorros de costos durante la vida útil del equipo
Beneficios de la transformación digital
La construcción necesita cambiar y usar las nuevas tecnologías que están surgiendo y no seguir con practicas del pasado. Es muy importante porque la industria de la construcción ha dañado nuestro medio ambiente y tiene un compromiso por arreglarlo. La única forma de hacerlo es siendo innovadores y cambiando la forma de pensar. Si no lo hacemos, los problemas seguirán creciendo. Tenemos que actuar ya y adoptar soluciones tecnológicas modernas en los procesos de la construcción.
Los empresarios que apuesten por la innovación y la transformación digital serán los líderes de un sector más eficiente, rentable, sostenible y capaz de satisfacer las necesidades de un mundo en constante cambio.
La transformación digital trae beneficios para desarrolladores, inversionistas y usuarios finales. Temas como reducción de tiempos de construcción; disminución de gastos por retrasos, errores y desperdicios; optimización de recursos; reducción de accidentes laborales y mejora de las condiciones de trabajo; información precisa para análisis avanzados en la toma de decisiones informadas y oportunas; son aspectos fundamentales para mejorar la productividad, la eficiencia y la sostenibilidad.
De igual forma, con esa transformación digital se logran proyectos con mejores retornos de inversión, menores riesgos, y clientes más satisfechos con inmuebles que tiene una huella ambiental más sostenible, sin sacrificar el confort y calidad de vida de los usuarios.
Tenemos que usar la tecnología y la innovación para mejorar la construcción. Esto no es algo opcional, es la única manera de crear un mejor futuro para todos. Si nos enfocamos en lo que la gente necesita y usamos herramientas digitales, podemos transformar la industria de la construcción para bien.
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